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domingo, 31 de octubre de 2010

¿Es su ojo “sencillo”?


¿Es su ojo “sencillo”?
Parte segunda
“Por eso, si tu ojo es sencillo, todo tu cuerpo estará brillante.” (MATEO 6:22.)
LA VISTA, por lo general, se considera el más preciado e importante de todos los sentidos, especialmente por aquellos que la han perdido. Los científicos dicen que cada segundo diez billones de partículas de luz pasan a través de las pupilas de nuestros ojos. Al converger estas en la retina, son recibidas por cien millones de células conocidas como bastoncillos y conos retinales. Activadas por la luz, estas células nerviosas comienzan a enviar señales eléctricas al cerebro (Glándula Pineal). Allí gran parte de los 100.000 millones de neuronas entran en función para descifrar lo que acaban de recibir y decidir qué reacción se necesita. Todo esto se lleva a cabo en una fracción de segundo. Verdaderamente los ojos y el ojo es un imponente y maravilloso ejemplo de la creación por un ser inteligente. (Salmo 139:14.)
 Aunque los científicos saben mucho de las funciones biológicas del ojo y del cerebro, su conocimiento en cuanto a cómo y por qué respondemos como lo hacemos a lo que perciben nuestros ojos es muy limitado. Por ejemplo, no se comprende a cabalidad por qué una persona tiene mayor preferencia por el color rojo que por el azul, mientras que otra tal vez prefiera el azul al rojo; tampoco se comprende por qué diferentes colores nos afectan de diferentes maneras. La relación que existe entre la visión y la reacción sigue siendo un misterio. Pero IEVE, el Hacedor del ojo, y su Hijo y colaborador, Jesucristo, conocen muy bien los detalles complicados del ojo físico, y saben cómo el ojo influye en nuestras acciones y en nuestra vida.
“La lámpara del cuerpo”
 Jesús dijo que “la lámpara del cuerpo es el ojo”. (Mateo 6:22.) Una lámpara se utiliza para alumbrar un lugar oscuro, para que sepamos dónde estamos, qué hacer, por dónde caminar, y así sucesivamente. Al admitir luz en nuestro cuerpo, nuestros ojos y nuestro ojo bien enfocado tienen la misma función que una lámpara. Nos permiten estar al tanto de lo que hay a nuestro alrededor sea físico o espiritual y responder de manera inteligente y específica, más bien que andar a tientas, tropezar y posiblemente sufrir algún daño.
 Sin embargo, el grado al que el ojo puede servir de lámpara para el cuerpo depende mucho de la condición en que esté. Por esta razón, Jesús pasó a decir: “Por eso, si tu ojo es sencillo, todo tu cuerpo estará brillante; pero si tu ojo es inicuo, todo tu cuerpo estará oscuro. Si en realidad la luz que hay en ti es oscuridad, ¡cuán grande oscuridad es ésa!”. (Mateo 6:22, 23.) Aquí podemos ver la gran influencia que el ojo ejerce en nuestro entero derrotero de vida, ya sea para bien o para mal.
La influencia del ojo, la relación entre los ojos y el ojo (Glándula Pineal)
 Considere el caso de la primera mujer, Eva. El grado al que el ojo influyó en sus acciones puede verse en el relato bíblico acerca del encuentro que ella tuvo con el Engañador, Satanás el Diablo. (2 Corintios 11:3; 1 Timoteo 2:14.) Satanás le dijo que ‘se le abrirían los ojos’ si sencillamente pasaba por alto el mandato de Dios y tomaba del fruto del “árbol del conocimiento de lo bueno y lo malo” y lo comía. ¿Cómo respondió ella? La Biblia nos dice: “Por consiguiente, la mujer vio que el árbol era bueno para alimento, y que a los ojos era algo que anhelar, sí, el árbol era deseable para contemplarlo”. Ella permitió que sus ojos se fijaran en algo que le era prohibido. Deliberadamente usó mal sus ojos. ¿Cuál fue el resultado? “Empezó a tomar de su fruto y a comerlo.” (Génesis 2:17; 3:4-6.)
 Sin duda, esta no fue la primera vez que Eva vio el “árbol del conocimiento de lo bueno y lo malo” ni su fruto. No obstante, algo diferente estaba sucediendo. Esta vez el fruto parecía “algo que anhelar” y “deseable para contemplarlo”. Normalmente el anhelo y el deseo no provienen del ojo, sino de la forma que lo alimentamos genera luz o oscuridad y así fomenta el deseo del corazón (sentimientos, llegando incluso a cambiar el ADN).  Lo que el ojo “ve” intensifica el anhelo y el deseo del corazón, es tanto así que pudiera resultar en alguna acción. En el caso de Eva, tal acción produjo consecuencias desastrosas tanto para ella y su esposo Adán como para toda su futura prole, incluso nosotros hoy día. (Romanos 5:12; Santiago 1:14, 15.)
 Para mostrar, sin embargo, que es posible resistir cualquier influencia mala que tal vez recibamos por los ojos, podríamos considerar el ejemplo de Jesucristo. De nuevo, fue el mismo Tentador, Satanás, quien presentó la prueba. En su tercer esfuerzo por apartar a Jesús de hacer la voluntad de Dios, “el Diablo lo llevó consigo a una montaña excepcionalmente alta, y le mostró todos los reinos del mundo y su gloria”. Note que Satanás no solo le ofreció verbalmente a Jesús todo el poder y la gloria del mundo a cambio de un acto de adoración. Más bien, “le mostró” estas cosas, aprovechándose así de la poderosa influencia del ojo. Pero debido a que no distrajo su vista con la oferta tentadora de Satanás, sino que la mantuvo fija en su relación con su Padre celestial, IEVE, Jesús logró frustrar los planes astutos de Satanás. (Mateo 4:8-10.)
 ¿Qué podemos aprender de los ejemplos anteriores? Primero, que aquello en que fijemos la vista y alimentemos la Glándula Pineal (conocimiento) puede fortalecer los buenos o los malos deseos del corazón. Puede hacer que actuemos de una manera que resulte en bendición o en desastre para nosotros mismos y otras personas. Segundo, queda claro que la visión es un medio favorito de Satanás para engañar a sus víctimas. Parece que de todos los “designios” que él usa para extraviar a la humanidad, el de atraer los ojos es uno de los más poderosos. (2 Corintios 2:11.)
 Hoy día Satanás todavía emplea la misma táctica en sus planes para apartar a la gente de establecer una interrelación con su Creador. Por medio de las cosas relucientes y atractivas del mundo, Satanás promueve “el deseo de la carne y el deseo de los ojos oscurecidos y la exhibición ostentosa del medio de vida de uno”. (1 Juan 2:16.) Esto se puede ver claramente por las propagandas comerciales del mundo. ¿No es cierto que los anuncios comerciales que se valen del impacto visual sean los que llegan a tener mayor éxito? Los miles de coloridos carteles y llamativos letreros, las atractivas fotografías en las revistas y periódicos, los astutos anuncios de televisión —y los miles de millones de dólares que cuesta producirlos— dan testimonio del hecho de que el propósito de la propaganda comercial es el de estimular “el deseo de los ojos mal enfocados” de los consumidores.
 Aunque muchos de estos anuncios publicitarios tal vez dejen muy poco para la imaginación, lo más sutil (programación mental) en esto es que tales anuncios no solo promueven artículos de consumo, sino también estilos de vida. Muy a menudo tales artículos se exhiben dando la idea de que quienes los usan son las personas más privilegiadas, influyentes, felices y bien parecidas. El mensaje que se transmite es que si el consumidor usa esos productos, su “medio de vida” automáticamente encajará dentro de una de esas categorías. Los anunciantes saben que una vez que alguien acepta cierto estilo de vida, se requerirá poco para persuadirlo a aceptar los artículos y productos que acompañan a tal estilo de vida. A la luz de esto, ¡cuán sensato es que los cristianos despiertos presten atención al consejo que se registra en Hebreos 13:5! Allí leemos: “Que el modo de vivir de ustedes sea exento del amor al dinero, y estén contentos con las cosas presentes”.
Mantenga su ojo “sencillo”, no “inicuo”
 Puesto que a diario nos enfrentamos con una serie de distracciones atractivas a los ojos, podemos comprender con más claridad por qué Jesucristo nos amonestó a mantener nuestro ojo “sencillo”, y no “inicuo”. (Mateo 6:22, 23.) ¿Qué significa eso? La palabra que se vierte aquí como “sencillo” se deriva de la palabra griega ha·plous´, que básicamente significa unidad de mente o devoción a un solo propósito. Por otra parte, la palabra “inicuo” en el griego original es po·ne·ros´, y significa malo, inútil, malvado. De modo que el ‘ojo sencillo’, en vez de dejarse distraer o desviar por todo lo que sucede, fija la atención en una sola cosa. Por el contrario, el ‘ojo inicuo’ es falso, astuto y codicioso, y lo atraen las actividades dudosas y oscuras.
 Pero, ¿en qué debe fijarse la vista de modo que ‘todo el cuerpo esté brillante’? Una consideración del contexto de estas palabras nos ayudará a hallar la respuesta. En los versículos anteriores Jesús estaba hablando acerca de “tesoros sobre la tierra” y “tesoros en el cielo”. Él dijo que “donde está tu tesoro, allí también estará tu corazón”. Luego, después de hablar del ojo, de nuevo enfatizó la necesidad de mostrar unidad de propósito, diciendo: “Nadie puede servir como esclavo a dos amos”, a Dios y a las Riquezas. En los siguientes versículos, él da consejo sobre el punto de vista que debemos tener tocante a las necesidades diarias y concluye con la siguiente amonestación: “Sigan, pues, buscando primero el reino y la justicia de Él, de nuestro creador, y todas estas otras cosas les serán añadidas”. (Mateo 6:19-34.)
 ¿Qué podemos sacar de todo esto? Jesús aquí está hablando de metas en la vida, y nos señala lo inútil que es el seguir tras las cosas materiales y las bendiciones que se obtienen de cultivar interés en una correcta interrelación con nuestro Hacedor. Obviamente nos está diciendo que si fijamos nuestra vista exclusivamente en esa interrelación personal, ‘todo nuestro cuerpo estará brillante’. ¿Por qué? Porque si nuestra meta en la vida es acrecentar la armonía con Dios, procuraremos reflejar esa luz en todo aspecto de nuestra vida. No solo podremos mirar hacia un futuro seguro, sino que también estaremos libres de las cosas oscuras y solapadas que resultan de llevar una vida dedicada a búsquedas egoístas. (2 Corintios 4:1-6.)
 El apóstol Pablo reforzó las palabras de Jesús al decir: “Los que están resueltos a ser ricos caen en tentación y en un lazo y en muchos deseos insensatos y dañinos, que precipitan a los hombres en destrucción y ruina”. (1 Timoteo 6:9.) ¡Estas palabras ciertamente tienen solidez! Los informes noticieros están llenos de relatos acerca de crisis financieras, crisis políticas y crisis religiosas provocadas por personas cuyo ojo está mal enfocado y dirigido hacia la corrupción, la oscuridad y en ello están implicados jefes de gobiernos, políticos, religiosos, senadores, alcaldes, jueces, banqueros, empresarios y hasta empleados de oficinas. La ‘tentación y el lazo’ de llegar a ser ricos ha hecho que personas que en un tiempo fueron respetables se convirtieran en delincuentes y criminales. De seguro no queremos que se nos ‘precipite a destrucción y ruina’, experimentando así la “oscuridad” de la cual advirtió Jesús. (Véase Proverbios 23:4, 5.)
 Sin embargo, ¿son los que fijan la vista en llegar a ser ricos los únicos que se enfrentan al peligro de andar en la oscuridad? No, pues “el deseo de los ojos mal enfocados” también incluye muchas otras cosas. Recuerde las palabras de Jesús registradas en Mateo 5:28: “Todo el que sigue mirando a una mujer a fin de tener una pasión por ella ya ha cometido adulterio con ella en su corazón”. Sin duda, esa advertencia también pudiera aplicar a permitir que los ojos de uno se fijen en cosas que han sido diseñadas para excitar o despertar pasiones y deseos ilícitos.
 También están las inquietudes sobre las que habló Jesús: el comer, el beber y el vestirse. (Mateo 6:25-32.) Aunque estas cosas son necesarias, el deseo excesivo de siempre querer tener lo último en la moda, lo más costoso y lo más deseado en el mercado puede esclavizar la mente y el corazón. (Romanos 16:18; Filipenses 3:19.) Aun en la recreación, pasatiempos, deportes, ejercicios, etcétera, debemos ejercer equilibrio apropiado y guardarnos contra el caer en las novedades y antojos de este mundo. En todo esto, sería bueno tener presente las sabias palabras que se registran en Proverbios 27:20: “El Seol y el lugar de la destrucción mismos no se satisfacen; tampoco se satisfacen los ojos mal enfocados del hombre”. Ciertamente debemos ejercer autodominio para no poner en peligro nuestra espiritualidad al tratar de satisfacer nuestros ojos.
Por lo tanto mantenga su ojo bien enfocado en una interrelación personal con el Creador IEVE Dios y sea beneficiario de sus bendiciones.
CONTINUARA.

LÁMPARA (Definición bíblica)


LÁMPARA

Lámpara del cuerpo, el ojo (Mt 6:22; Lu 11:34):

 PARTE PRIMERA

En esta consideración vamos a examinar las aplicaciones que hace la Biblia sobre la Lámpara, vamos a contrastar el sentido de esta palabra con el ojo, los ojos, su interrelación entre sí, los efectos en la personalidad y la relación con nuestro Creador.
Uso literal:
Diseño y uso literal de la Lámpara en la antigüedad:
Vasija usada para producir luz artificial. Tiene una mecha para quemar líquidos inflamables, como el aceite. La mecha absorbe el fluido por atracción capilar y alimenta la llama. Las mechas estaban hechas de lino (Isa 42:3; 43:17), junco pelado o cáñamo. El fluido que se solía quemar en las lámparas antiguas era aceite de oliva (Éx 27:20), aunque también se usaba el aceite de terebinto.
Los que fueron a detener a Jesús también llevaban consigo lámparas y antorchas. (Jn 18:3.)
Las lámparas caseras por lo general estaban hechas de barro, a pesar de que en Palestina también se han descubierto lámparas de bronce. La lámpara común cananea tenía la forma de un platillo, con una base redondeada y un borde vertical. Su borde estaba ligeramente acanalado por un lado, formando un pico donde descansaba la mecha. En algunas ocasiones, estaban acanaladas las cuatro esquinas, lo que permitía poner cuatro mechas. Con el transcurso del tiempo, se hicieron lámparas de formas muy diversas, algunas de ellas cerradas salvo por dos agujeros: uno en la parte superior (casi centrado), por donde se reponía el aceite, y el otro en el pico donde se colocaba la mecha. Había lámparas que en el lado opuesto a la punta tenían un asa anular, a veces horizontal, pero en la mayoría de los casos en posición vertical. Las lámparas grecorromanas llevaban figuras mitológicas antropomórficas o de animales, pero las de fabricación judía estaban decoradas con dibujos de hojas de parra o espirales.
Las lámparas de platillo más antiguas tenían el color terroso del barro. En el siglo I E.C. las había de varios colores: marrón claro, anaranjadas y grises. Las de fabricación romana tenían una capa de vidriado rojo.
Las lámparas que se utilizaban en los hogares y en otros edificios normalmente se colocaban en un nicho en la pared o sobre una repisa que salía de una pared o de una columna. También se colgaban del techo por medio de una cuerda, y a veces se ponían sobre estantes hechos de barro, madera o metal. Tales lámparas iluminaban toda la habitación. (2Re 4:10; Mt 5:15; Mr 4:21.)
No parece haber indicios de que en tiempos bíblicos se emplearan para alumbrar las velas o candelas que hoy conocemos. En lugar del cilindro de cera o sebo solidificados que se derrite con el calor de la llama, entonces se usaba aceite. Por esa razón, la traducción de la palabra hebrea ner y el sustantivo griego lý·kjnos por “candela” o “vela”, que aparecen con diversa frecuencia en algunas versiones, antiguas y modernas (por ejemplo, en Pro 24:20 [DK; Fer; Scío; Val, 1909] y Lucas 11:33 [Enz, Esc, JPP, Petite, TA]), puede considerarse impropia; muchas traducciones modernas emplean correctamente en su lugar la palabra “lámpara” (BJ; NM; Val, 1960).
Su uso en el santuario. (Posiblemente este diseño tenga una aplicación simbólica en su aplicación) El diseño del candelabro de oro que había en el tabernáculo de Israel era diferente al de los candelabros modernos. Se hizo de acuerdo con las instrucciones que IEVE Dios transmitió (Éx 25:31), ornamentado con globos y flores alternadas, y llevaba tres brazos que salían a cada lado de un poste central, con lo que tenía siete soportes para siete lámparas. En estas lámparas solo podía ponerse aceite puro de oliva, batido. (Éx 37:17-24; 27:20.) Posteriormente, en el templo de Salomón hubo diez candelabros de oro y un buen número de candelabros de plata. (1Re 7:48, 49; 1Cr 28:15; 2Cr 4:19, 20; 13:11.)
Uso figurado o simbólico
IEVE es una lámpara y una fuente de luz. IEVE es la Fuente suprema de luz y guía. Después de ser liberado de la mano de Saúl y de sus enemigos, David dijo: “Tú eres mi lámpara, oh Jehová, y es IEVE quien hace brillar mi oscuridad”. (2Sa 22:29.) En los Salmos se usa una expresión ligeramente distinta: “Tú mismo encenderás mi lámpara, oh IEVE”, representando así a IEVE como el que encendía la lámpara que David llevaba para iluminar su camino. (Sl 18:28.)
Jesucristo. En la Nueva Jerusalén de los cielos, según la vio el apóstol Juan en visión, “no existirá noche”. La luz de la ciudad no proviene del Sol ni de la Luna, porque la gloria de IEVE Dios ilumina directamente la ciudad, igual que la nube de luz que los hebreos llamaban Shekinah iluminaba el Santísimo del antiguo tabernáculo y del templo. (Le 16:2; compárese con Nú 9:15, 16.) Y el Cordero Jesucristo es su “lámpara”. Esta “ciudad” arrojará su luz espiritual como guía para las naciones, es decir, los habitantes de la “nueva tierra”. (Rev 21:22-25.)
Reyes del linaje de David. IEVE Dios sentó sobre el trono de Israel al rey David, y este fue, con la dirección de Dios, guía y caudillo sabio de la nación. Por eso se le llamó “la lámpara de Israel”. (2Sa 21:17.) En su pacto del Reino con David, IEVE prometió: “Tu mismísimo trono llegará a ser un trono firmemente establecido hasta tiempo indefinido”. (2Sa 7:11-16.) Por consiguiente, la dinastía o linaje familiar de gobernantes procedentes de David a través de su hijo Salomón fue como una “lámpara” para Israel. (1Re 11:36; 15:4; 2Re 8:19; 2Cr 21:7.)
Cuando se destronó al rey Sedequías y se le llevó cautivo a Babilonia para morir allí, parecía que la “lámpara” se había extinguido; no obstante, Jehová no había abandonado su pacto, sino que simplemente mantenía pendiente la gobernación sobre el trono ‘hasta que viniera aquel que tiene el derecho legal’. (Eze 21:27.) Jesucristo —el Mesías y el “hijo de David”— es heredero de ese trono para siempre, por lo que la “lámpara” de David nunca se apagará. Como posee el Reino para siempre, es una lámpara eterna. (Mt 1:1; Lu 1:32.)
La Palabra de Dios. Puesto que “no de pan solamente debe vivir el hombre, sino de toda expresión que sale de la boca de IEVE” (Mt 4:4), sus mandamientos son como una lámpara que ilumina el camino del siervo de Dios en la oscuridad espiritual de este mundo. El salmista declaró: “Tu palabra es una lámpara para mi pie, y una luz para mi vereda”. (Sl 119:105.) El rey Salomón dijo: “Porque el mandamiento es una lámpara, y una luz es la ley, y las censuras de la disciplina son el camino de la vida”. (Pr 6:23.)
El apóstol Pedro había visto cumplidas muchas profecías sobre Jesucristo y había estado presente en su transfiguración en la montaña. En vista de todo esto, pudo decir: “Por consiguiente, tenemos la palabra profética hecha más segura; y ustedes hacen bien en prestarle atención como a una lámpara que resplandece en un lugar oscuro, hasta que amanezca el día y el lucero se levante, en sus corazones”. (2Pe 1:19.) Por lo tanto, al cristiano se le anima a dejar que la luz de la Palabra profética de Dios ilumine su corazón (centro de sus motivaciones). De esta manera le proveerá guía segura “hasta que amanezca el día y el lucero se levante”.
Los siervos de Dios. En el año 29 E.C. Juan, el hijo del sacerdote Zacarías, fue anunciando: “Arrepiéntanse, porque el reino de los cielos se ha acercado”. (Mt 3:1, 2; Lu 1:5, 13.) Israel se había desviado de obedecer la Ley, y a Juan se le envió para predicar arrepentimiento y señalar al Cordero de Dios. Tuvo éxito en volver a muchos de los hijos de Israel hacia IEVE su Dios. (Lu 1:16.) Por consiguiente, Jesús dijo de Juan: “Aquel hombre era una lámpara que ardía y resplandecía, y ustedes por un poco de tiempo estuvieron dispuestos a regocijarse mucho en su luz. Pero yo tengo el testimonio mayor que el de Juan, porque las obras mismas que mi padre me asignó realizar, las obras mismas que yo hago, dan testimonio acerca de mí, de que el Padre me despachó”. (Jn 5:35, 36.)
Jesús también dijo a sus discípulos: “Ustedes son la luz del mundo. No se puede esconder una ciudad cuando está situada sobre una montaña. No se enciende una lámpara y se pone debajo de la cesta de medir, sino sobre el candelero, y alumbra a todos los que están en la casa. Así mismo resplandezca la luz de ustedes delante de los hombres, para que ellos vean sus obras excelentes y den gloria al Padre de ustedes que está en los cielos”. (Mt 5:14-16.) Por lo tanto, el siervo de Dios debería apreciar la razón por la que se le da la luz (interrelación entre el Espíritu  Santo y el suyo propio) y darse cuenta de que sería totalmente insensato y desastroso no dejar que resplandeciera su luz como si se tratase de una lámpara.
Otros usos figurados o simbólicos.
Cada una de las cinco vírgenes discretas de la ilustración de Jesús tenía una lámpara y un receptáculo con aceite. (Mt 25:1-4.)
Aquello de lo que una persona depende para iluminar su camino está simbolizado por una lámpara. Con tal símbolo, el proverbio contrasta al justo con el inicuo, diciendo: “La mismísima luz de los justos se regocijará; pero la lámpara) de los inicuos... se extinguirá”. (Glándula pineal desactivada, seca (Pr 13:9.) La luz del justo continuamente se hace más brillante. Sin embargo, en el caso de los inicuos, por más que dé la impresión de resplandecer su lámpara y, como consecuencia, por próspero que pueda parecer su camino, Dios hará que terminen en oscuridad, donde sus pies, con toda seguridad, tropezarán. Este es el resultado que le espera a aquel que invoca el mal contra su padre y su madre. (Pr 20:20.)
El que se ‘extinga la lámpara’ de alguien también significa que no hay ningún futuro para él. Otro proverbio dice: “No resultará haber futuro para ninguno que es malo; la mismísima lámpara de los inicuos se extinguirá”. (Pr 24:20.)
Cuando Bildad dio a entender que Job estaba escondiendo alguna maldad secreta, dijo en cuanto al inicuo: “Una luz misma ciertamente se oscurecerá en su tienda, y en ella su propia lámpara se extinguirá”. Más adelante, Bildad añade a su argumento lo siguiente: “No tendrá posteridad ni descendencia entre su pueblo”. En vista de que se dijo que Salomón, hijo de David, era una lámpara que Dios le había dado a su padre, el apagar la lámpara de alguien puede transmitir la idea de que tal persona no tendría progenie para recibir su herencia. (Job 18:6, 19; 1Re 11:36.)
De manera que, el ojo de una persona es una “lámpara”. Jesús dijo: “La lámpara del cuerpo es el ojo, (Glándula Pineal). Por eso, si tu ojo es sencillo [o: “es sincero; está todo en una sola dirección; está enfocado; es generoso”], todo tu cuerpo estará brillante; pero si tu ojo es inicuo, todo tu cuerpo estará oscuro”. (Mt 6:22, 23, nota.) El ojo es como una lámpara porque permite al cuerpo andar en armonía con el Espíritu Santo y no en la inclinación carnal “deseos de la carne” Gálatas 5: 19-24
Cuando en Proverbios 31:18 se dice de la buena esposa: “Su lámpara no se apaga de noche”, se emplea una expresión figurada que significa que ella trabaja en armonía con el Espíritu de Dios y no permite que la “noche”, la oscuridad la domine. (Compárese con Pr 31:15.)
Según Proverbios 20:27, “el aliento del hombre terrestre es la lámpara de Jehová, y escudriña cuidadosamente todas las partes más recónditas del vientre”. Lo que una persona “exhala” o expresa en público, sea bueno o malo, revela o arroja luz sobre su personalidad o lo más recóndito de ella. (Compárese con Hch 9:1.)

CAPACIDAD DE PENSAR (definición bíblica)


CAPACIDAD DE PENSAR (definición bíblica)
Esta consideración es apropiada para el examen de nuestra Glándula Pineal, como se sabe actuamos según pensamos.
El término hebreo mezim·máh se usa para designar la capacidad de pensar, es decir, la capacidad de dar consideración seria y juiciosa a un asunto con conocimiento de causa (Pr 5:2; 8:12); los ardides, estratagemas e ideas insensatas de hombres inicuos (Sl 10:2, 4; 21:11; 37:7; 139:19, 20; Pr 12:2; 24:8; Jer 11:15), o las “ideas” que IEVE Dios o que su “corazón” se propone realizar. (Job 42:2; Jer 23:20; 30:24; 51:11.)
Uno de los objetivos de los proverbios es dar al joven y al inexperto conocimiento y capacidad de pensar. (Pr 1:1-4.) La información que se halla en los proverbios es una ayuda valiosa para orientar el pensamiento y la vida de la persona. La capacidad de pensar  es el DON de libertad de decisión, con ella podemos sopesar las cosas y tomar una decisión consecuente, por otro lado ella nos puede salvaguardar de seguir un proceder incorrecto y de asociarse con quienes pueden ejercer una influencia hacia el mal, ó por el contrario nos puede ayudar a asociarnos con aquellas personas que ejerzan una influencia sana pues ayuda a discernir el resultado final de un proceder. Todo ello resulta en bendición. La sabiduría y la capacidad de pensar protegen a la persona de actividades que conducen a calamidad ó de la manipulación psicológica y así resultan ser vida para el alma (la persona misma). Tal persona disfruta de seguridad y no tiene por qué temer que le alcance la justicia divina por haber llegado a ser culpable de una mala acción. (Pr 3:21-25.)
Sin embargo, aquel que verdaderamente ejerce la capacidad de pensar también puede llegar a ser objeto de odio. Es posible que esta sea la idea expresada en Proverbios 14:17: “El hombre de capacidades de pensar es odiado”. A menudo las personas que no son reflexivas ven con desaprobación a quienes utilizan sus facultades mentales. Además, los que ocupan sus facultades mentales en tener una relación estrecha con nuestro Creador pueden esperar que se les odie. Jesús dijo a este respecto: “Porque ustedes no son parte del mundo, sino que yo los he escogido del mundo, a causa de esto el mundo los odia”. (Jn 15:19.) Por supuesto, el término utilizado en el lenguaje original para “capacidades de pensar” en Proverbios 14:17 puede implicar también pensamiento maligno. Por lo tanto, otro significado de ese texto pudiera ser que se odia al hombre que trama el mal, y así es como lo vierten muchas traducciones: “El hombre de inicuas intrigas será odiado” (DK, Mod; véase BAS, BJ, MK y otras).

MENTE
Facultad del cerebro que permite reunir información, razonar y extraer conclusiones. El término “mente” traduce varias palabras griegas afines que expresan cualidades de la mente, tales como juicio, percepción,(aquí juega un papel importante la glándula pineal) inteligencia, raciocinio, pensamiento, intención, recuerdo, estado mental, opinión, inclinación y actitud. A veces, donde algunas versiones traducen “mente”, otras emplean los términos descriptivos o específicos ya mencionados. En las Escrituras Hebreas algunas versiones traducen por “mente” las palabras hebreas que propiamente significan “corazón”, “alma” y “espíritu”. (Compárese con Dt 4:39, nota; Da 5:21, Val; Pr 23:7, Val, 1989; Eze 20:32, DK; Mod;)
‘Sean hechos nuevos en la fuerza que impulsa su mente.’ La inclinación natural de la mente del hombre que no cultiva una relación con el Creador tiende al pensar incorrecto. La Biblia denomina esta inclinación “mente carnal” (Val) o “disposición de ánimo carnal” (NM). (Col 2:18.) A los cristianos se les recuerda que antes eran enemigos de Dios porque ocupaban sus mentes en obras que eran inicuas. (Col 1:21.)
La mente del hombre “físico” (literalmente, “animal [de índole de alma]”), distinto del hombre “espiritual”, tiende hacia lo material. La fuerza que impulsa su mente es el resultado en parte de la herencia y en parte de lo que se le ha enseñado y lo que ha experimentado. Cuando se le presenta una cuestión, esta fuerza presiona o impulsa su mente en una dirección materialista o carnal. Por lo tanto, a los cristianos se les dice que “deben ser hechos nuevos en la fuerza [espíritu] que impulsa su mente”. (Ef 4:23.) Esta fuerza impulsora puede transformarse con una consideración de la Palabra de verdad de Dios y mediante la actuación de Su espíritu, de manera que la actitud mental dominante de la persona se incline en la dirección correcta. Entonces, ante una determinada cuestión, esta fuerza inclinará a la mente al debido proceder espiritual. (1Co 2:13-15.) Tal persona adquiere “la mente de Cristo”, cuya inclinación mental siempre fue espiritual. (1Co 2:16; Ro 15:5.)
El simple conocimiento o facultad intelectual no es suficiente para que alguien disfrute del favor divino. Estas cosas por sí mismas no rehacen la mente para que alguien haga la voluntad de Dios. (Ro 12:2.) IEVE dice: “Haré perecer la sabiduría de los sabios, y echaré a un lado la inteligencia de los intelectuales”. (1Co 1:19.) Se requiere la ayuda del espíritu de Dios para conseguir entendimiento (Pr 4:5-7; 1Co 2:11), sabiduría y buen sentido verdaderos. (Ef 1:8, 9.)
La ‘ley de la mente’. El apóstol Pablo llama ley de la mente a la que controla el funcionamiento de esta mente renovada en armonía con la “ley de Dios”, en la que se deleita la nueva mente. Pero la “ley del pecado”, que actúa en la carne caída, lucha contra la ‘ley de la mente’, de manera que hay un conflicto constante dentro del cristiano. ¿Puede salir victorioso? Sí, “¡gracias a Dios mediante Jesucristo nuestro Señor!”. La bondad inmerecida de Dios concede el perdón por los pecados de la carne sobre la base del sacrificio de rescate de Cristo y además proporciona la ayuda del espíritu santo. La situación del cristiano es diferente de la de aquellos que no lo son, como lo resume Pablo: “Así pues, con mi mente yo mismo soy esclavo a la ley de Dios, pero con mi carne a la ley del pecado”. (Ro 7:21-25; Gál 5:16, 17.)
¿Cómo puede la mente salir victoriosa de esta batalla? El apóstol Pablo lo aclara aún más con las siguientes palabras: “Los que están en conformidad con la carne fijan la mente en las cosas de la carne; pero los que están en conformidad con el espíritu, en las cosas del espíritu. Porque el tener la mente puesta en la carne significa muerte, pero el tener la mente puesta en el espíritu significa vida y paz; porque el tener la mente puesta en la carne significa enemistad con Dios, porque esta no está sujeta [la carne caída, imperfecta] a la ley de Dios, ni, de hecho, lo puede estar [...]. Por eso, si el espíritu del que levantó a Jesús de entre los muertos mora en ustedes, el que levantó a Cristo Jesús de entre los muertos vivificará también sus cuerpos mortales mediante Su espíritu que reside en ustedes”. (Ro 8:5-11.)
La “intención” del espíritu. En romanos 8:26, 27, Pablo explica que quizás en algunas ocasiones los siervos de Dios no sepan exactamente qué pedir en oración, o como necesitan hacerlo. Pero Dios sabe que ellos desean que se cumpla Su voluntad, y sabe también lo que sus siervos necesitan. En el pasado Dios hizo que se registraran en su Palabra muchas oraciones inspiradas que expresaban su voluntad o su interés en ellos. De modo que Él acepta estas oraciones inspiradas como si fueran lo que las personas que luchan  en contra de la inclinación de su mente hacia lo carnal debieran desear y pedir en oración, y la contesta. Dios conoce a los de corazón recto ó que están desarrollando una inclinación mental conforme a su espíritu y también conoce el significado de las cosas que hizo que su espíritu hablara mediante los escritores de la Biblia. Sabe cuál es “la intención [mente, pensamiento] del espíritu” cuando el espíritu “aboga” o intercede de este modo por ellos.
Amar con la mente. IEVE predijo que haría un nuevo pacto bajo el cual el espíritu santo obraría para escribir Sus leyes en la mente y corazón de Su pueblo. (Heb 8:10; 10:16.) De esta manera pueden cumplir aquello de lo que pende toda la Ley y los profetas, a saber, ‘amar a IEVE su Dios con todo su corazón y con toda su alma y con toda su mente, y a su prójimo como a sí mismo’. (Mt 22:37-40; Lu 10:27, 28.) Se debe amar a Dios con todo el corazón (los deseos, sentimientos y emociones de la personalidad interior), con toda el alma (la vida y todo el ser) y con toda la mente (las facultades intelectuales). Esta última frase significa que los siervos de Dios no solo deben amar con sentimientos, emociones y fuerza, sino que también deben emplear su mente de forma concienzuda para llegar a conocer profundamente a Dios y Cristo (Jn 17:3), conseguir entendimiento (Mr 12:33; Ef 3:18), servir a Dios y sus propósitos, y declarar en lo posible estas buenas noticias (mensaje de la nueva esperanza ó las implicaciones del nuevo Pacto). Se les aconseja que “mantengan la mente fija en las cosas de arriba” (Col 3:2), que “fortifiquen su mente para actividad” y “mantengan completamente su juicio”. (1Pe 1:13.) El apóstol Pedro vio la importancia de ‘despertar sus facultades de raciocinio claro’ para tener presentes las cosas aprendidas. (2Pe 3:1, 2.) Asimismo, deben ‘tener muy presente la venida del día de IEVE’. (2Pe 3:11, 12.)
Cuando habló de los dones milagrosos del espíritu que actuaron en la congregación cristiana primitiva, Pablo destacó la necesidad de utilizar la mente. Dijo que en el caso de que orase en una lengua que no pudiera traducir, su mente sería infructífera. Además, si cantara alabanzas así, ¿cómo ayudaría al oyente que no entendiese la lengua? Por consiguiente, dijo que prefería hablar cinco palabras con su mente, con el fin de instruir a otros, que diez mil en una lengua; después estimuló a sus hermanos para que llegaran a estar plenamente desarrollados en facultades de entendimiento. (1Co 14:13-20.)
A los cristianos genuinos de IEVE se les manda que estén “aptamente unidos en la misma mente y en la misma forma de pensar”. (1Co 1:10; Flp 2:2; 1Pe 3:8.) Por supuesto, esto significa unidad en lo relacionado con los intereses de la adoración pura, las cosas importantes, no en gustos personales o en asuntos de menor importancia, que se resolverán en el momento en que se adquiera la madurez. (Ro 14:2-6, 17.) Tienen que ser “de la misma mente en el Señor” (Flp 4:2); no deben disputar, sino continuar “pensando de acuerdo”. (2Co 13:11.)
Los cristianos genuinos tienen que esforzarse por conocer mejor a Dios en todo aquello en lo que Él se ha pronunciado. (Ro 11:33, 34; 16:25, 26.) También deben tener la actitud mental de obediencia sin coacciones y humildad de Jesucristo; de este modo tendrán “la mente de Cristo”. (1Co 2:15, 16.) Pedro aconseja: “Puesto que Cristo sufrió en la carne, ustedes también ármense de la misma disposición mental”. (1Pe 4:1.)
Una mente embotada o corrupta. En el monte Sinaí, los israelitas tenían sus facultades mentales embotadas debido a que no habían vuelto sus corazones completamente a IEVE; y lo mismo ocurrió con aquellos que se mantuvieron bajo la Ley después de que Dios la abolió por medio de Jesús. (2Co 3:13, 14.) No reconocieron que Jesús era aquel a quien señalaba la Ley (y éstos siguen esperando un libertador, el cual presentaran dentro de poco). (Col 2:17.) En cuanto a los hombres que no aprobaron en su mente el llegar a conocer  a Dios, sino que adoraron las cosas creadas, “Dios los entregó a un estado mental desaprobado”, quedando mentalmente en oscuridad y haciendo todo tipo de cosas inútiles e impropias. (Ro 1:28; Ef 4:17, 18.) Los hombres de mente corrupta resistieron este hecho  incluso en el tiempo de Moisés, y más tarde tales hombres lucharon contra el cristianismo verdadero, algunos hasta alegaron que eran cristianos, pero intentaron dividir y perturbar las congregaciones. (2Ti 3:8; Flp 3:18, 19; 1Ti 6:4, 5.)  Esa clase de personas tienen las mentes y conciencias contaminadas y nada es limpio para ellas; por lo tanto, hablan sin provecho en su intento de embaucar las mentes de los cristianos verdaderos y esclavizarlos a opiniones humanas. (Tit 1:10-16.) Por esta razón, es esencial que todos los cristianos, en particular los que han llegado a conocer a Dios por su mayor entendimiento, sean de juicio sano. (Ro 12:3; 1Ti 3:2; Tit 2:6; 1Pe 4:7.)
El “dios de este sistema de cosas”, el Diablo, ciega las mentes de los incrédulos a la iluminación de las buenas nuevas acerca del Cristo. (2Co 4:4.) Por lo tanto, existe el peligro de que este archienemigo de Dios pueda seducir a los cristianos con su astucia y corromper sus mentes “de la sinceridad y castidad que se deben al Cristo”. (2Co 11:3.) Por este motivo, es necesario que los cristianos demuestren unidad de mente con su hacedor, sean razonables y sigan orando para que la paz de Dios “que supera a todo pensamiento” guarde sus facultades mentales por medio de Cristo Jesús. (Flp 4:2, 5-7.)
Curar y abrir la mente. Jesús devolvió el juicio a un endemoniado, lo que mostró su poder para hacerlo incluso en el caso de las personas a las que los demonios habían enloquecido. (Mr 5:15; Lu 8:35.)
Jesús también puede abrir las mentes de los que tienen fe para que capten el significado de las Escrituras. (Lu 24:45.) Las personas tímidas o las que se sienten inferiores intelectualmente pueden obtener consuelo de las palabras del apóstol Juan: “Sabemos que el Hijo de Dios ha venido, y nos ha dado capacidad intelectual para que podamos llegar a conocer al verdadero Dios. (1Jn 5:20.)
Pablo mostró a la congregación corintia que tenía juicio sano, aunque pareciera que ‘había perdido el juicio’ cuando se jactaba de sus credenciales como apóstol, algo que un cristiano normalmente no haría. Les aclaró que se vio obligado a hacerlo para que se volviesen a Dios y no fueran desviados. Esto se debía a que habían acudido a apóstoles falsos que los estaban apartando del buen camino. (2Co 5:13; 11:16-21; 12:11, 12, 19-21; 13:10.) Lo mismo ocurre hoy.
El siguiente tema va más allá, se hace un examen de la capacidad mental en las circunstancias que rodearon el árbol de la vida y el árbol del bien y del mal con relación a Adán y Eva, es un tema que vino a coalición al presentarse unas cuestiones por medio de un foro, el cual expongo para su entendimiento.
Las preguntas que se presentaron fueron las siguientes.
¿Si Adán era perfecto por que pecó?
¿Por qué no fue destruido Adán y así nos hubiéramos librado del sufrimiento?
En El próximo apunte analizaremos esta cuestión.
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¿Si Adán era perfecto por que pecó?
¿Por qué no fue destruido Adán y así nos hubiéramos librado del sufrimiento?

VEAMOS:
El pasaje bíblico de Génesis dice así:

1:27 Y Dios procedió a crear al hombre a su imagen, a la imagen de Dios lo creó; macho y hembra los creó. 28 Además, los bendijo Dios y les dijo Dios: “Sean fructíferos y háganse muchos y llenen la tierra y sojúzguenla, y tengan en sujeción los peces del mar y las criaturas voladoras de los cielos y toda criatura viviente que se mueve sobre la tierra”.
29 Y Dios pasó a decir: “Miren que les he dado toda vegetación que da semilla que está sobre la superficie de toda la tierra y todo árbol en el cual hay fruto de árbol que da semilla. Que les sirva de alimento. 30 Y a toda bestia salvaje de la tierra y a toda criatura voladora de los cielos y a todo lo que se mueve sobre la tierra en que hay vida como alma he dado toda la vegetación verde para alimento”. Y llegó a ser así.
31 Después de eso vio Dios todo lo que había hecho y, ¡mire!, [era] muy bueno. Y llegó a haber tarde y llegó a haber mañana, un día sexto.


Preguntas y respuesta extraídas de un foro que me han llevado a profundizar en el tema expuesto, el cual le invito a examinar.
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Recibí este nuevo mensaje:
 Saludos a todos, tengo una pequeña duda.
PREGUNTA: ¿Si Dios creó a Adán y Eva perfectos como es que pecaron?
Cuando alguno de nosotros tomamos una decisión podemos considerar que "simplemente" nos basamos en dos hechos: Nuestra predisposición genética y nuestro entorno.
Cada persona de nacimiento esta predispuesta a ciertas actitudes, y aunque, estas sean más o menos vagas, existe.

RESPUESTA:
ESO ES CIERTO, POR NATURALEZA HACEMOS COSAS ERRÓNEAS, POR NUESTRO ENTORNO SON LAS MENOS INFLUENTES O LAS QUE MENOS NOS CONDICIONAN A TOMAR UNA DECISIÓN, PERO, DETRAS DE ESTA INFLUENCIAS TENEMOS NUESTRA CAPACIDAD DE UN PENSAMIENTO ¿ESO QUE QUIERE DECIR? POR EJEMPLO SI PONEMOS UN GRUPO DE MONOS TODOS JUNTOS PARA QUE REALICEN UNA HOBRA LO SEGURO ES QUE NO REALIZARAN NADA, Y Dios pasó a decir: “Hagamos [al] hombre a nuestra imagen, según nuestra semejanza, y tengan ellos en sujeción los peces del mar y las criaturas voladoras de los cielos y los animales domésticos y toda la tierra y todo animal moviente que se mueve sobre la tierra”.
ESA ES UNA DE LAS DIFERENCIAS QUE EXISTE ENTRE LOS SERES HUMANOS Y LOS ANIMALES, EL HOMBRE TIENE LA CAPACIDAD DE PENSAR Y POR LO TANTO ESE PENSAMIENTO LE LLEVA A CREAR COSAS Y CAMBIAR SISTEMAS POLITICOS, RELIGIOSOS, ECONOMICOS ETC.
POR QUE PECÓ ADAN, SIMPLEMENTE POR QUE USANDO SU LIBRE PENSAMIENTO TOMÓ UNA DECISIÓN PERSONAL, DE LA CUAL SE LE HABÍA ADBERTIDO QUE NO TOMARA DECISIONES QUE PERJUDICARAN A SU DESCENDENCIA, POR LO TANTO COMO SERES LIBRES DECIDIERON POR SÍ SOLOS, FUERON CULPABLES DE ASESINATO Y ESTO PRODUJO SU ENEMISTAD CON SU CREADOR.
16 Y también impuso Jehová Dios este mandato al hombre: “De todo árbol del jardín puedes comer hasta quedar satisfecho. 17 Pero en cuanto al árbol del conocimiento de lo bueno y lo malo, no debes comer de él, porque en el día que comas de él, positivamente morirás”.
SALUDOS.
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Otro:
OPINIÓN SOBRE LA PREGUNTA: 
Lo que creo que al final importa más es la educación y el entorno en el cual se ha crecido.
Si cogemos el caso de Adán y Eva. Ellos eran perfectos, por lo tanto no tendrían que tener una predisposición excesiva para hacer el mal. Ellos dos estuvieron en un entorno ideal, el Paraíso, además con una "educación" de primera mano del propio Dios. Así que los dos factores de Predisposición genética y ambiente quedarían anulados como la posible causa de haber pecado.
La respuesta fácil en este momento seria decir: el libre albedrio. ¿Pero...que es exactamente el libre albedrio? ¿Es la suma de la predisposición genética más el entorno? ¿Es un conjunto aleatorio de factores? ¿Es algo que realmente no se sabe qué es?
Entonces es cuando salen mis dudas más profundas:
Si el libre albedrio es simplemente un factor que depende de la predisposición genética y del entorno: Entonces Dios falló, o nos hizo mal, o el entorno no era adecuado y por eso Adán y Eva pecaron.
Si el libre albedrio es simplemente un factor aleatorio. ¿Estamos todos condenados por culpa del azar? ¿Es esto justo?
Si el libre albedrio es algo místico... pues ya ves, otro dogma
¿Hay alguna otra explicación?

Gracias.

OTRA CUESTIÓN:
¿Por qué no destruyó Dios a Adán y Eva y creó a otra pareja?
De esta forma nos hubiéramos evitado estas tragedias de nuestras vidas y de los demás.
RESPUESTA:
COMO HEMOS VISTO EN EL TEMA ANTERIOR DIOS CREÓ A LOS SERES HUMANO COMO CRIATURAS LIBRES, A DIFERENCIA DE LOS ANIMALES ELLOS NO TENIAN QUE ESTAR EN SUJECCIÓN, BAJO UN DOMINIO, BAJO UNA GOBERNACIÓN ETC. SIMPLEMENTE DEBERÍAN GUIARSE POR SU CONCIENCIA Y TENER UNA RELACIÓN CON SU CREADOR COMO DE HIJOS A SU PADRE.
GENESIS 1: 26 Y Dios pasó a decir: “Hagamos [al] hombre a nuestra imagen, según nuestra semejanza,( CRIATURAS LIBRES) y tengan ellos en sujeción los peces del mar y las criaturas voladoras de los cielos y los animales domésticos y toda la tierra y todo animal moviente que se mueve sobre la tierra”
GENESIS 2:9  Así Jehová Dios hizo crecer del suelo todo árbol deseable a la vista de uno y bueno para alimento, y también el árbol de la vida en medio del jardín, y el árbol del conocimiento de lo bueno y lo malo. (La capacidad del pensamiento del hombre de poder cambiar las cosas para bien o para mal)
COMO VEMOS EN EL TEXTO ELLOS SÍ TENIAN QUE TENER EN SUJECCIÓN A LOS ANIMALES, CRIATURAS QUE NO ERAN LIBRES POR ESO LOS ANIMALES NO FUERON CREADOS CON EL PODER DE CAMBIAR LAS COSAS POR MEDIO DEL PENSAMIENTO.
SE DEDUCE DE ESTA RESPUESTA QUE ADAN TOMÓ UNA DECISIÓN PERSONAL Y SE ALIÓ EN REBELDÍA EN UNA CONSPIRACIÓN EN CONTRA DE SU FUTURA DESCENDENCIA (PUES A DIOS NO LE AFECTAVA ESE ASUNTO PARA NADA, EN EL SENTIDO DE QUE ESA REBELIÓN LE SUJETARA A ÉL) EL PLAN ESTABA MUY BIEN PLANTEADO LOS ÁNGELES INICUOS QUERIAN PRECISAMENTE ESO, TENER BAJO SU GOBERNACIÓN Y SUJECCIÓN A LA DESCENDENCIA HUMANA.
Génesis 3: 1Ahora bien, la serpiente resultó ser la más cautelosa de todas las bestias salvajes del campo que Jehová Dios había hecho. De modo que empezó a decir a la mujer: “¿Es realmente el caso que Dios ha dicho que ustedes no deben comer de todo árbol del jardín?”. 2 Ante esto, la mujer dijo a la serpiente: “Del fruto de los árboles del jardín podemos comer. 3 Pero en cuanto a [comer] del fruto del árbol que está en medio del jardín, Dios ha dicho: ‘No deben comer de él, no, no deben tocarlo para que no mueran’”. 4 Ante esto, la serpiente dijo a la mujer: “Positivamente no morirán. 5 Porque Dios sabe que en el mismo día que coman de él tendrán que abrírseles los ojos y tendrán que ser como Dios, conociendo lo bueno y lo malo”.

Génesis 3:17 Y a Adán dijo: “Porque escuchaste la voz de tu esposa y te pusiste a comer del árbol respecto del cual te di este mandato: ‘No debes comer de él’, maldito está el suelo por tu causa. Con dolor comerás su producto todos los días de tu vida. 18 Y espinos y cardos hará crecer para ti, y tienes que comer la vegetación del campo. 19 Con el sudor de tu rostro comerás pan hasta que vuelvas al suelo, porque de él fuiste tomado. Porque polvo eres y a polvo volverás”.
EN EL VERSICULO 14 Y 15 DEL CAPITULO 3 DEL GENESIS SE NOS DICE LO SIGUIENTE
14 Y Jehová Dios procedió a decir a la serpiente: “Porque has hecho esta cosa, tú eres la maldita de entre todos los animales domésticos y de entre todas las bestias salvajes del campo. Sobre tu vientre irás, y polvo es lo que comerás todos los días de tu vida. 15 Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu descendencia y la descendencia de ella. Él te magullará en la cabeza y tú le magullarás en el talón”.
LO QUE SE NOS DEMUESTRA AQUÍ ES LA CONFIRMACIÓN DE TODO LO EXPUESTO ANTERIORMENTE, DIOS DA UNA SENTENCIA Y UNA ESPERANZA PARA LA DESCENDENCIA DE ADÁN, EL LIBERARLA DE LA CONPISRACIÓN BAJO DOMINIO A LA QUE SE UNIÓN ADAN.
Ampliando esta consideración  podemos decir que la representación del “árbol del bien y del mal” tiene que ver con la capacidad de pensar, nuestra mente, la forma en la que dirigimos nuestros pensamientos llevándonos a actuar de una forma u otra.
En romanos 7:14 (leer) se nos dice que “fuimos vendidos bajo pecado” esto es, que se nos vendió sin la posibilidad de presentar nuestra defensa ó apoyar una determinación u otra por el hecho de la imposibilidad de estar presentes.
Se deduce por estas circunstancias que fuimos procreados en un estado de rebelión bajo un deterioro genético y sin la posibilidad de alcanzar el estado original óptimo teniendo una relación estrecha con nuestro Creador  de padre a hijo, a partir de ese momento les éramos extraños, extranjeros.
En el capítulo 2:17 de Génesis  podemos ver las consecuencias de hacer un mal uso de la capacidad de pensar  Pero en cuanto al árbol del conocimiento de lo bueno y lo malo, no debes comer de él, porque en el día que comas de él, positivamente morirás”.
Volviendo al capítulo 7 de romanos versiculos15-24 Pablo presenta un cuadro mental con dos vertientes, dos fuerzas impulsoras enfrentadas, una, relacionada con el resultado de haber sido vendidos bajo pecado y la otra la “nueva fuerza impulsora”, el empuje del conocimiento espiritual basado en la ley de Cristo (esto es sus enseñanzas).
La primera fuerza hereditaria resulta en actitudes esclavizantes impulsadas por el pensamiento cautivo al desorden o pecado, el desatino de lo que es la justicia verdadera ó divina.
En el capítulo 8 del mismo libro de romanos se nos insta a entender las dos acciones o fuerzas impulsoras una que lleva a la muerte y la otra a la libertad de la prisión adámica.
Cuando en Mateo 7: 13 y 14 se nos hace referencia los dos caminos se están refiriendo  a dos formas de usar el pensamiento con dos resultados.
Se deduce por lo tanto que nosotros lo mismo que Adán poseemos la capacidad del libre pensamiento, por lo tanto en eso somos totalmente libres y responsables de decisiones, ¿por qué? Porque mediante  la mente podemos cambiar el estado de las cosas, crear, destruir etc.
Adán era una criatura libre totalmente pero dentro de un cosmos ordenado, él usó el pensamiento para poner nombre a los animales génesis 2:20.
Creado a la imagen de Dios Gen 1:26 debía tener en sujeción a toda la creación terrestre, pero no se le autorizó a tener en sujeción a su futura descendencia, por otro lado no se dice en ninguna parte que él estuviera bajo un “pacto” o bajo una “ley”, siendo semejante a su Creador en el sentido de su estado igualmente libre. Hebreos 2: 7 y 8.
El árbol del bien y del mal era un simbolismo que hace referencia a la capacidad de pensar, aunque se menciona que Adán era perfecto quiere decir que estaba dentro de unos límites igual que el cosmos esta dentro de de unas leyes que lo gobierna en el que no hay desorden y todo funciona perfecto, en el caso de las olas del mar tienen su límite en la orilla, se puede decir que Dios ha fijado su límite y dentro de ella funcionan perfectamente.
Así era el caso de Adán y Eva ellos podían tener en sujeción toda la creación en la Tierra menos a su futura descendencia, esta sería libre igual que sus progenitores y solo serian responsables a su Creador.
Vemos por lo tanto que el pecado de Adán y Eva fue unirse o hacerse miembros de  una conspiración para esclavizar a su futura descendencia, si su rebelión hubiera sido en contra de su Creador por el poder hxcubieran sido ejecutados de inmediato, pero ese no fue el caso.
La versión de los setenta comenta el versículo de Génesis 3:6 como sigue “Eva vio que el árbol era bueno para impartir sabiduría, inteligencia, prudencia”, dicho de otra forma, impartir = comunicar leyes estableciéndolas; sabiduría, la cual se adquiere por medio del conocimiento ¿Quién impartiría el conocimiento? Prudencia, ser precavido ¿para qué? Es obvio. Pero ¿a quién le iba a impartir esas cosas si solo estaban dos? Podemos deducirlo, a su futura descendencia,  no se nos hace referencia de ellos de su vida después de estos acontecimientos pero de fuentes extra bíblicas como son hallazgos  arqueológicos sí se sabe como los llegaron a considerar sus descendencias (si lo desea puede solicitar esa información) claro está, esto no lo llevarían a cabo ellos solos pues ya dijimos que se unieron en un conspiración a otras entes superiores que son los que nos siguen dominando pues Adán y Eva ya no existen,( existe un libro que no ha sido admitido en el canon bíblico aquí en occidente, sin embargo sí está incluido en las traducciones etíopes y es el libro de Enoc, este libro circulaba entre los cristianos del primer siglo y era leído, en la Biblia se hace referencia a él varias veces por ejemplo, Hebreos 11:5, Judas 14 etc. a estas entes que promovieron la rebelión Pedro dice lo siguiente 2ª de Pedro 2:4 Ciertamente si Dios no se contuvo de castigar a los ángeles que pecaron, sino que, al echarlos en el Tártaro, los entregó a hoyos de densa oscuridad para que fueran reservados para juicio;
Sería importante leer este libro para tener un comprensión adecuada de las circunstancias (si lo desea lo puede solicitar a f.ugarit@gmail.com)
Volviendo al tema que nos ocupa, cuando se dice que Eva empezó a desear el árbol quiere decir que empezó a desear la posibilidad de  ser ella misma la fuente de impartir conocimiento, sabiduría, independientemente de su Creador, transmitiéndole la idea a su hombre (Oseas 6:4) y uniéndose a la usurpación junto con los seres opositores.
Por lo tanto es cierto lo que Pablo les escribe a los romanos con respecto a la capacidad de pensar,  Romanos 8:6 leer, “fijar la mente en las cosas de la carne” refiriéndose a pensamientos de interés exclusivamente personal y no en los de Dios ya que Él es un espíritu) significa muerte, en el capítulo 12:2 leer, Pablo insta a “transformarse ó rehacer la mente” para pensar no en una forma personal exclusiva = carne, sino mas bien en una forma espiritual según lo dispuso el Creador = tener en cuenta el punto de vista de lo que Dios piensa del asunto a tratar.
Proverbios 4: 23 hace referencia al “corazón” como centro de las motivaciones las cuales son el resultado de un pensar, razonar, estableciendo un fundamento de nuestro yo personal, por eso nos aconseja este pasaje que lo que más debemos salvaguardar es nuestra capacidad de pensar  ¿porqué? Porque procedentes de ese equilibrio está la fuente de la vida, se deduce que según tomemos una determinación u otra tendremos vida o muerte, por lo tanto somos libres igual que Adán y Eva a la hora  de tomar decisiones al dirigir nuestra mente. Pro. 16: 17.
En Mateo 22: 37 dice Él le dijo: “‘Tienes que amar a IEVE tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma y con toda tu mente’. 38 Este es el más grande y el primer mandamiento. 39 El segundo, semejante a él, es este: ‘Tienes que amar a tu prójimo como a ti mismo’. Esto significa tener la mente en el espíritu que es lo mismo decir “según lo dispuesto por nuestro Creador”.
Es interesante lo que de nuevo nos dice Pablo en Romanos 5:14 “No obstante, la muerte reinó desde Adán hasta Moisés, aun sobre los que no habían pecado a la semejanza de la transgresión de Adán, el cual tiene un parecido con el que había de venir.”
Estas palabras nos hacen entender mucho mejor el asunto que estamos tratando, si prestamos mejor atención vemos que desde Adán hasta que se dio la ley mosaica fue un periodo de tiempo de libertinaje en los cuales las gentes se guiaban por su conciencia en base de sus propias decisiones personales, cuando se hace referencia a personas “justas” de ese tiempo es porque algunos entendieron  la cuestión envuelta, independientemente de que en aquel tiempo existieran leyes o no, no fueron dadas por Dios, las que existieron fueron tiranías de sometimiento forzoso, ejercieron su libertad para la maldad.
No tenían unas leyes basadas en el pensamiento de su Creador por lo tanto no podían ser acusados ni condenados en esa base su única condena era la herencia de Adán, cuando entra la ley mosaica sí se les hace ver que no todas sus prácticas estaban justificadas como habría sido hasta entonces, muchos fueron condenados por la misma ley muriendo una muerte de sentencia independientemente de la herencia adámica.
Viene Cristo el semejante a Adán y nos redime de las dos condenas de la heredad y de la ley entrando en un periodo de bondad inmerecida por parte de nuestro Creador, pero siguiendo con nuestra facultad de libre pensamiento, ya que no se nos obliga ni se nos somete a aceptar una cosa ni la otra, pero todo está dentro de unos límites naturales los cuales rigen todo el universo.
Esta bondad inmerecida se extiende a toda la humanidad pero para aquellos que no supieron de ella existe una resurrección ya que esta dádiva es una deuda que Dios tiene pendiente con nosotros hasta que la cumpla.
Este tiempo de bondad inmerecida es un tiempo de reconciliación voluntaria de parte de los humanos, las puertas están abiertas para todo el que lo desee Romanos 6:3 declara que los que aceptan esta bondad es un “bautismo en Cristo” quiere decir que igual que él se inclinó en tener en cuenta a su Padre en su pensamiento los que lo deseen se inclinaran por esta misma forma de pensar y también aceptan su muerte en sentido figurado, quiere decir que dejan de lado la forma de pensar exclusivista que nos esclaviza a la muerte Romanos 6: 11-14.
Esto es otra demostración al asunto del “árbol del bien y del mal” es otra demostración de nuestra libertad de pensamiento el cual sigue teniendo DOSA OCCIONES CON DOS RESULTADOS.
Surge una pregunta relacionada con este tema ¿Qué es lo que representa el “Árbol de la vida”?
Lo consideraremos posteriormente.
Para consultas escriba a f.ugarit@gmail.com